La exvocera de la desaparecida Misión de Apoyo Contra la Corrupción e Impunidad en Honduras (Maccih), Ana María Calderón, señaló este jueves que la CICIH (mecanismo internacional anticorrupción) ya no vendrá al país tras la decisión de la presidenta Xiomara Castro de denunciar el Tratado de Extradición con Estados Unidos.
»Lamentablemente, el mensaje que se está enviando es que no hay una voluntad de cooperar con los demás países en la lucha contra el crimen organizado y la corrupción», arguyó.
Añadió que »en un mundo globalizado, donde todos los países están comprometidos en romper barreras para combatir estos problemas, cerrar la puerta a un país mediante la denuncia de un tratado de extradición es una señal negativa».
Impacto en la lucha contra el crimen organizado
La denuncia del Tratado de Extradición se produce en un contexto de creciente preocupación sobre la eficacia de la cooperación internacional en la lucha contra el crimen organizado y la corrupción transnacional.
Calderón subrayó que este cambio podría aislar a Honduras en términos de colaboración internacional.
»Es una forma de aislamiento que podría afectar negativamente la capacidad de ambos países para enfrentar estos desafíos globales», indicó.
Según la experta en derecho internacional, la situación actual indica una fase preoperativa en la que es incierta la llegada de nuevos acuerdos o medidas.
»Con el último paso dado, diría que no va a ser posible que se instale una nueva misión en el corto plazo», comentó Calderón, quien destacó que la falta de un Tratado de Extradición podría entorpecer los esfuerzos conjuntos contra el crimen organizado.
