Sindicato del Hospital San Felipe apoya intervención, señala que es un rescate necesario La presidenta del sindicato Iris Zelaya, , se pronunció sobre la reciente intervención en el centro hospitalario, señalando que esta medida se tomó debido a los «procesos engorrosos y no muy transparentes» que han afectado la gestión del hospital en los últimos tres años.Zelaya, dijo a Proceso Digital, que el San Felipe ha sufrido un deterioro constante debido a las «desastrosas administraciones» que ha tenido, lo que ha resultado en la no ejecución del presupuesto del hospital por tercer año consecutivo.«Esto significa que faltarán insumos, equipos y medicamentos, porque no tenemos dinero para las compras. Lo poco que se ha adquirido ha sido gracias a inyecciones de la Secretaría y al uso de fondos recuperados», explicó Zelaya.Ante esta situación, la junta interventora ha sido designada con el objetivo de rescatar el presupuesto del hospital y agilizar los procesos internos. Zelaya destacó que, hasta ahora, tareas tan simples como la adquisición de un tornillo podían tardar hasta tres semanas.La presidenta del sindicato expresó su apoyo total a la intervención, considerándola una medida «sana» y necesaria para el hospital.«El que nada debe, nada teme. Ellos no vienen a culpar a nadie, sino a suturar algo que está roto», afirmó a este medio.Además, destacó la importancia de que las personas que trabajen con la junta interventora aprendan y se apoyen mutuamente, con la esperanza de que esta intervención sirva para evitar que el hospital vuelva a caer en la misma situación.A renglón seguido dijo que, aunque la intervención llegó de manera sorpresiva, «como un balde de agua fría», Zelaya indicó que era algo esperado debido a la crítica situación en la que se encontraba el hospital.Los principales problemas que la junta interventora debe abordar incluyen la ejecución del presupuesto, lo cual permitirá al hospital tener libertad de compra y evitar endeudamientos que obligan a realizar compras mínimas con fondos recuperados, concluyó